viernes, 29 de enero de 2016

¿QUÉ DIJO JESÚS SOBRE NOSOTROS? HECHOS PARA UNA RELACIÓN CON DIOS

                               De la Revista y-Jesús
Si usted lee el Nuevo Testamento, descubrirá que JESÚS HABLÓ CONSTANTEMENTE SOBRE NUESTRO INMENSO VALOR PARA DIOS, Y NOS CUENTA QUE DIOS NOS CREÓ PARA SER SUS HIJOS.
Bono, la estrella de rock irlandés de la banda U2, comentó en una entrevista, “ES UN CONCEPTO ALUCINANTE PENSAR QUE EL DIOS QUE CREÓ EL UNIVERSO PUEDA QUERER NUESTRA COMPAÑÍA, UNA VERDADERA RELACIÓN CON LAS PERSONAS…” [5]
Es decir, que antes de haber creado el Universo, Dios planeaba adoptarnos como su familia.
No sólo eso, SINO QUE ÉL HA PLANEADO UNA INCREÍBLE HERENCIA QUE NOS CORRESPONDE A NOSOTROS RECIBIR.

Como el corazón del padre en el cuento de Jesús, DIOS NOS QUIERE DAR UNA HERENCIA DE BENDICIONES INIMAGINABLES Y PRIVILEGIOS REALES. PARA ÉL, SOMOS ESPECIALES.

LA LIBERTAD DE ELEGIR
En la película The Stepford Wives, HOMBRES DÉBILES, MENTIROSOS, CODICIOSOS Y ASESINOS han creado robots sumisos y obedientes para reemplazar a sus esposas liberadas, a quienes consideran una amenaza.
Aunque los hombres supuestamente aman a sus esposas, LAS REEMPLAZAN CON MÁQUINAS A FIN DE OBLIGARLAS A OBEDECER.
Dios nos podría haber hecho así, personas robóticas (iPeople) PROGRAMADAS PARA AMARLO Y OBEDECERLO, PROGRAMÁNDONOS PARA VENERARLO COMO SE PROGRAMA A UNA COMPUTADORA.

PERO ENTONCES NUESTRO AMOR OBLIGATORIO NO TENDRÍA SENTIDO.

Dios quería que lo amemos libremente.
EN UNA VERDADERA RELACIÓN, NOSOTROS QUEREMOS QUE NOS AMEN POR QUIENES SOMOS, NO POR OBLIGACIÓN – preferimos a nuestra alma gemela que a una novia por encargo. Søren Kierkegaard resumió el dilema en esta historia.
Imagínese que había un rey que amaba a una doncella humilde.
Este rey no era como ningún otro rey.
Todos temblaban ante su poder…sin embargo, este rey poderoso se ablandó por su amor por una doncella humilde.
¿Cómo podría declararle su amor?
De cierta forma extraña, su realeza lo tenía atado de manos.
Si la llevaba al palacio y la coronaba con joyas…entonces ella seguramente no se resistiría – nadie se atrevía a oponérsele.
¿Pero ella lo amaría? Claro que ella diría que lo amaba, ¿PERO LO AMARÍA REALMENTE?[6]
Puede ver cuál es el problema. Dicho de manera menos poética: ¿Cómo terminas con un novio omnisciente? (“Lo nuestro simplemente no funciona, pero bueno, supongo que eso ya lo sabías”.)
ENTONCES, A FIN DE PERMITIR UN AMOR AL CUAL SE CORRESPONDE LIBREMENTE, DIOS CREÓ A LOS SERES HUMANOS CON UNA CAPACIDAD ÚNICA: EL LIBRE ALBEDRÍO.

La rebelión contra las leyes morales de Dios

C.S. LEWIS PENSABA QUE AUNQUE ESTAMOS PROGRAMADOS INTERNAMENTE CON UN DESEO DE CONOCER A DIOS, NOS REBELAMOS CONTRA ESE DESEO DESDE EL MOMENTO QUE NACEMOS.[7]
Lewis también empezó a analizar sus propios motivos, lo cual lo llevó a descubrir QUE ÉL SABÍA INSTINTIVAMENTE DISTINGUIR ENTRE EL BIEN Y EL MAL.

Lewis se preguntaba de dónde proviene esta percepción de la diferencia entre el bien y el mal.
Todos experimentamos este reconocimiento del bien y el mal cuando leemos sobre el asesinato de seis millones de judíos a manos de Hitler, o sobre un héroe que sacrifica su vida por alguien.
SABEMOS INSTINTIVAMENTE QUE ESTÁ MAL MENTIR Y ENGAÑAR.

Este reconocimiento de que estamos programados con una ley moral interna llevó a este antiguo ateo a concluir que tiene que haber un “Legislador” moral.
En efecto, según tanto Jesús como las Sagradas Escrituras, Dios nos ha dado una ley moral que debemos obedecer.
Y NO SÓLO LE HEMOS DADO LA ESPALDA A UNA RELACIÓN CON ÉL, TAMBIÉN HEMOS VIOLADO ESTAS LEYES MORALES QUE DIOS ESTABLECIÓ.
La mayoría de nosotros sabe algunos de los Diez Mandamientos:
“No mentir, robar, matar, cometer adulterio”, etc. JESÚS LOS RESUMIÓ DICIENDO QUE DEBEMOS AMAR A DIOS CON TODO NUESTRO CORAZÓN Y AL PRÓJIMO COMO A NOSOTROS MISMOS.

POR ELLO, EL MAL QUE HACEMOS NO ES SÓLO LA FALTA QUE COMETEMOS AL VIOLAR LA LEY, SINO TAMBIÉN ES NO HACER LO CORRECTO.
Dios creó el universo con leyes que gobiernan todo lo que está dentro de él.
Éstas son inviolables e inalterables.
Cuando Einstein derivó la fórmula E=MC2, reveló el misterio de la energía nuclear.

Al juntar los ingredientes correctos bajo condiciones precisas, se desencadena un inmenso poder.

Las Sagradas Escrituras nos dicen que la ley moral de Dios no es menos válida, dado que ésta proviene de Su propio carácter.
                  
DESDE EL PRIMER HOMBRE Y LA PRIMERA MUJER, HEMOS DESOBEDECIDO LAS LEYES DE DIOS, AUNQUE ÉSTAS SEAN PARA NUESTRO PROPIO BIEN.
Y HEMOS DEJADO DE HACER LO CORRECTO. HEREDAMOS ESTA CONDICIÓN DEL PRIMER HOMBRE, ADÁN.

LA BIBLIA LLAMA PECADO A ESTA DESOBEDIENCIA, Y ESA PALABRA SIGNIFICA “FALLAR EL BLANCO”, COMO UN ARQUERO QUE FALLA A SU OBJETIVO DESEADO.

Así, nuestros pecados han roto la relación que deseaba tener Dios con nosotros.

En el ejemplo del arquero, HEMOS FALLADO AL OBJETIVO EN CUANTO AL PROPÓSITO PARA EL CUAL FUIMOS CREADOS.

El pecado causa la ruptura de todas las relaciones:
LA RAZA HUMANA DESCONECTADA DE SU MEDIO AMBIENTE        (DESCONEXIÓN),
LAS PERSONAS DIVIDIDAS DENTRO DE SÍ MISMAS (CULPA Y VERGÜENZA),
LA GENTE DESCONECTADA DE LOS DEMÁS (GUERRA, ASESINATO) Y
GENTE QUE SE HA SEPARADO DE DIOS (LA MUERTE ESPIRITUAL).

Como eslabones en una cadena, una vez que se rompió el primer eslabón entre Dios y la humanidad, SE DESATARON TODOS LOS VÍNCULOS QUE DEPENDÍAN DE ÉSTE.

Y estamos rotos. Como dice Kanye West en una canción, “No creo que haya nada que pueda hacer para corregir mis errores…quiero hablar con Dios pero tengo miedo porque no hablamos hace mucho tiempo…” LA LETRA DE WEST HABLA DE LA SEPARACIÓN QUE EL PECADO TRAE A NUESTRAS VIDAS. Y SEGÚN LA BIBLIA, ESTA SEPARACIÓN NO ES SÓLO LA LETRA DE UNA CANCIÓN DE RAP. ÉSTA TIENE CONSECUENCIAS MORTALES.

Nuestros pecados nos han separado del amor de Dios
Nuestra rebelión (el pecado) ha creado una pared que nos separa de Dios (ver Isaías 59:2).

En las Sagradas Escrituras, la “separación” significa la muerte espiritual.
Y LA MUERTE ESPIRITUAL SIGNIFICA ESTAR COMPLETAMENTE SEPARADO DE LA LUZ Y LA VIDA DE DIOS.

Usted podría decir, “Pero espere un momento. ¿Dios no sabía todo eso antes de habernos creado?
¿Por qué no vio que su plan estaba condenado al fracaso?”

Por supuesto, un Dios omnisciente se daría cuenta de que nos rebelaríamos y que pecaríamos.

En efecto, nuestro fracaso hace que su plan sea tan asombroso.


ESTO NOS LLEVA A LA RAZÓN POR LA QUE DIOS VINO A LA TIERRA EN FORMA HUMANA. Y MÁS INCREÍBLE AÚN – LA RAZÓN POR LA QUE MURIÓ.

No hay comentarios:

Publicar un comentario