sábado, 25 de junio de 2016

¿NOS COMPADECEMOS DE LA INHUMANA EXISTENCIA DE PERSONAS OPRIMIDAS E IGNORANTES DE SU DIGNIDAD?

¿NOS COMPADECEMOS DE LA INHUMANA EXISTENCIA DE PERSONAS OPRIMIDAS E IGNORANTES DE SU DIGNIDAD?  

Ideario Jesuita
“Ante un mundo roto y deseoso de unidad es necesario proclamar con gozo y fe firme que Dios es comunión, Padre, Hijo y Espíritu Santo, unidad en la distinción, el cual LLAMA A TODOS LOS HOMBRES Y MUJERES A QUE PARTICIPEN DE LA MISMA COMUNIÓN TRINITARIA.

Es necesario proclamar que esa comunión ES EL PROYECTO MAGNÍFICO DE DIOS EN JESUCRISTO...Es necesario proclamar que la Iglesia es signo e instrumento de la comunión querida por Dios, iniciada en el tiempo y dirigida a su perfección en la plenitud del Reino”.

La vocación humana es comulgar plenamente con Dios. Toda espiritualidad pretende ser camino que conduce a la comunión con Dios.

“Es voluntad de Dios el salvar y santificar a los hombres, no aisladamente SINO CONSTITUYENDO UN PUEBLO”, el Pueblo de la Alianza.

Como Dios Trinidad, el pueblo en comunidad. La Iglesia, Pueblo de Dios (I Pe 2,9-10), sacramento de salvación, TIENE COMO FINALIDAD ÚLTIMA EL UNIR (“RELIGAR”) LA HUMANIDAD CON SU SEÑOR.

Amar y comulgar con Dios CONLLEVA AMAR AL PRÓJIMO (Jn 15,9-13; I Jn 4,19-21).

EL SEÑOR, AL CONTEMPLAR LA INHUMANA EXISTENCIA DE PERSONAS OPRIMIDAS E IGNORANTES DE SU DIGNIDAD, SE COMPADECE (Ex 3,7-9; Mc 6,34) Y POR LA FUERZA DE SU ESPÍRITU LAS LIBERA Y CONFORMA COMO SU PUEBLO: CONSCIENTES, ORGANIZADOS, Y LIBRES.

LA INICIATIVA FUE Y ES DE DIOS (I Jn 4,10). Hoy, el Señor NOS SIGUE INVITANDO A REJUVENECER LA IGLESIA, SU PUEBLO, Y LLEGAR A SER PERSONAS ADULTAS EN LA FE, LO CUAL SE FACILITA EN LAS PEQUEÑAS COMUNIDADES DE BASE (DM,c.15. n10; DP,642).

Por ello, las parroquias se organizan como comunidad de comunidades de hijos e hijas de Dios, al servicio del Reino.  
Es el Verbo Encarnado, Jesucristo, el Buen Pastor QUE ENTREGA SU VIDA PARA QUE TENGAMOS LA VIDA ETERNA EN LA COMUNIÓN PLENA CON DIOS (Jn 10,10-18).

La Compañía de Jesús, en seguimiento del Buen Pastor, quiere que LA PASTORAL PARROQUIAL TENGA COMO CENTRO Y FINALIDAD ÚLTIMA AYUDAR A LA COMUNIÓN PERFECTA CON DIOS Y EL PRÓJIMO, EN LA IGLESIA, PUEBLO DE DIOS.

Los jesuitas, tenemos en San Ignacio un ejemplo inspirador.
Procuró en toda su vida servir y amar a su Señor y extender su Reino Y POR ELLO LE FUE CENTRAL EN SU MISIÓN EL COOPERAR EN LLEVAR A TODO HOMBRE Y MUJER A LA COMUNIÓN CON SU CREADOR Y SEÑOR.

Fue Ignacio un místico señalado maestro de espiritualidad.
Los Ejercicios Espirituales siguen siendo un instrumento privilegiado PARA AYUDAR A ENCONTRARNOS CON NUESTRO SEÑOR.

Los jesuitas en las reducciones de Paraguay, fueron fieles al Evangelio y a Ignacio, al responder, en primer lugar, AL HAMBRE Y SED DE DIOS DE LOS GUARANÍS, IMPULSANDO A UN PUEBLO DIGNO ORGANIZADO EN COMUNIDADES DE HIJOS E HIJAS DE DIOS.

En el hoy, nuestras parroquias deben priorizar y distinguirse por su espiritualidad y vida comunitaria Y ASÍ AYUDAR AL PROCESO DE UNIR, POR EL ESPÍRITU, A TODA PERSONA CON DIOS Y SU PUEBLO.

Así mismo, la parroquia está llamada a ser manantial de la experiencia de Jesucristo y su Reino; ESCUELA NOTABLE DE FE, ESPERANZA Y CARIDAD; LUGAR DONDE SE VIVE Y COMPARTE LA MÍSTICA CRISTIANA; fuente donde crece y se expresa nuestro amor a María; organización para el bien de personas en comunidades evangelizadas y evangelizadoras.

Por tanto, cooperaremos con los laicos(as) a que vivan su espiritualidad, o sea, la espiritualidad del Pueblo de Dios, y su consiguiente llamado a la santidad, LO CUAL CONLLEVA QUE DESCUBRAN SU PROPIO MODO DE SER SANTOS EN SU CONTEXTO SOCIAL Y ECLESIAL.

Por ello, queremos ayudar y promover un proceso que: SUSCITE Y ALIMENTE PRIORITARIAMENTE EL AMOR PERSONAL Y APASIONADO A JESUCRISTO Y SU REINO.
Para ello, tenemos el medio privilegiado de los Ejercicios Espirituales para que asuma:
La espiritualidad cristiana,
Encarnada,
Comunitaria,
Fraterna,
Solidaria y
Litúrgica, que vive la evangélica opción preferencial POR LOS POBRES Y AYUDE A QUE LOS FIELES DE LA PARROQUIA PUEDAN HACER SUYA ESTA ESPIRITUALIDAD Y OPCIÓN DESDE SU ESTADO LAICAL.

La conciencia que Dios nos salva, NO AISLADAMENTE, NI EN UNA MASA INFORME, SINO EN EL PUEBLO DE LA NUEVA ALIANZA.

Por ello, debemos ayudar a superar situaciones eclesiales de masa informe subconsciente, al organizar la parroquia en comunidad de comunidades pequeñas, QUE FAVOREZCAN LA PARTICIPACIÓN Y CRECIMIENTO DE TODOS COMO ADULTOS EN LA FE.  

Coopere en nuestros pueblos, A CRECER EN EL CARIÑO Y DEVOCIÓN A MARÍA PIDIÉNDOLE “NOS PONGA CON SU HIJO”, COMO SAN IGNACIO NOS DIO EJEMPLO Y NOS IMPULSA EN ESE SENTIDO.

Promueva que somos “pacientes pastorales”, es decir, PERSONAS Y COMUNIDADES NECESITADAS DE EVANGELIZACIÓN Y CONVERSIÓN PERMANENTE.

Edifique a la parroquia COMO MANANTIAL Y ESCUELA DE ORACIÓN, DONDE SE FORMEN CRISTIANOS CONTEMPLATIVOS EN LA ACCIÓN.

Facilite que los creyentes TENGAN MOMENTOS DE ENCUENTRO PERSONAL CON EL SEÑOR Y PROMUEVA LA REALIZACIÓN DE RETIROS ESPIRITUALES PERIÓDICOS.
Ofrezca instancias de acompañamiento espiritual para que cada persona PERCIBA LOS LLAMADOS QUE EL SEÑOR LE HACE EN SUS ACTIVIDADES COTIDIANAS, SUS ALEGRÍAS Y DIFICULTADES.

Ayudaremos especialmente a los jóvenes, PARA QUE DESCUBRAN O FORTALEZCAN SU VOCACIÓN.

Facilite que descubran nuestra espiritualidad ignaciana, LA CUAL ENRIQUEZCA A LA COMUNIDAD PARROQUIAL E IGLESIA LOCAL.

Dar a conocer y emplear en los diversos procesos de formación, el método pedagógico Ignaciano.
Un indicador de nuestra espiritualidad será si surgen o no vocaciones a la Compañía.

EDUQUE EN EL DISCERNIMIENTO DE LA VOLUNTAD DE DIOS EN LAS SITUACIONES CONCRETAS, EN EL ESPÍRITU Y TENSIÓN DEL “MAGIS” que significa vivir efectivamente nuestra fe cristiana CRECIENDO EN LA AMISTAD CON EL SEÑOR JESÚS Y EN EL SERVICIO A LOS DEMÁS.

ASÍ DIRIGE NUESTROS OJOS A LA CRUZ EN LA CUAL FUE REVELADO “EL AMOR HASTA EL FIN”.

Así mismo SIMBOLIZA EL CAMINO CRISTIANO, REALIZADO DE MODO IGNACIANO, QUE NOS DIRIGE HACIA LA VIDA PLENA.

Contribuir a que las personas que trabajan con nosotros tengan una actitud de búsqueda de la voluntad de Dios, Y NO SE CONFORMEN CON UN “HACER COSAS”, SINO QUE DESCUBRAN AQUELLO QUE RESPONDE MEJOR A LOS DESEOS DEL SEÑOR.

Ayude a la formación y colaboración con los laicos(as) en la misión, con los cuales BUSQUEMOS FERVOROSAMENTE ESCULPIR EN NUESTROS PUEBLOS LOS VALORES EVANGÉLICOS.

Sólo junto con ellos, dada la diversidad de culturas y manifestaciones religiosas, PODREMOS CONTRIBUIR MEJOR A LA INCULTURACIÓN DEL EVANGELIO Y AL DIÁLOGO INTERRELIGIOSO.


La PARROQUIA: COMUNIDAD de COMUNIDADES FRATERNA

No hay comentarios:

Publicar un comentario