¿HAZ
ACEPTADO LA HUMILDE INVITACIÓN DE JESÚS, AUNQUE NO TENGAS DONDE RECLINAR LA
CABEZA, PERO SÍ HALLAR TU PLENA SATISFACCIÓN PERSONAL EN EL SERVICIO
A LOS DEMÁS?
Homilía del padre Carlos Cardó.
Jesús en su viaje a Jerusalén
atraviesa una aldea de Samaría. Desde que Israel se dividió en los reinos de
Judea y Samaría, los judíos trataban a los samaritanos de réprobos y herejes.
Por eso, al pasar Jesús por esa
región, no es bien recibido.
La reacción de Santiago y Juan,
conocidos como los violentos (Boanergés o hijos del trueno), ES UNA MUESTRA DEL ODIO RACIAL, RELIGIOSO Y
POLÍTICO QUE SE TENÍAN AMBOS PUEBLOS: ¿Quieres que mandemos fuego del cielo
que acabe con ellos?
Apelan a la violencia en nombre de
Dios para resolver las diferencias. Jesús
los reprende.
ÉL
NO ACEPTA NINGUNA FORMA DE VIOLENCIA.
AL
CONTRARIO, QUIERE ELIMINARLA DE RAÍZ CON SU EJEMPLO Y DOCTRINA SOBRE EL
AMOR, EL PERDÓN, LA TOLERANCIA Y EL DIÁLOGO.
JESÚS
NOS INVITA A EVITAR QUE LAS DIFERENCIAS SE CONVIERTAN EN CAUSA DE DIVISIÓN Y A
QUE PROCUREMOS FORJAR LA UNIÓN VERDADERA QUE SE DA CON EL RESPETO A LAS
DIFERENCIAS.
Apropiarse de Cristo y de su mensaje,
CREER QUE SÓLO QUIENES PIENSAN COMO
NOSOTROS LO HACEN RECTAMENTE, ESO SUELE SER LA CAUSA DE LAS ACTITUDES DE
INTOLERANCIA, EXCLUSIÓN Y ACEPCIÓN DE PERSONAS, QUE DAÑAN PROFUNDAMENTE A LA
IGLESIA.
Jesús alienta en nosotros la
verdadera tolerancia, que es AMPLITUD DE
CORAZÓN PARA ACOGER, RESPETAR Y VALORAR A AQUELLOS, QUE QUIZÁ NO PIENSAN
COMO YO, PERO BUSCAN TAMBIÉN SERVIR CON BUENA VOLUNTAD.
«Tolerancia, amplitud de miras,
respeto, diálogo, colaboración…, son pues virtudes esencialmente eclesiásticas.
Y no debemos olvidar que sólo hay una
cosa que en el plano humano puede establecer la unidad en la Iglesia: EL AMOR, QUE PERMITE AL OTRO SER DE OTRA
MANERA, AUNQUE NO LOGRE “COMPRENDERLO”» (K. RAHNER).
Los restantes versículos nos confrontan con las exigencias radicales del seguimiento de Jesús por medio de tres breves y cortantes escenas.
- En la primera, un hombre sale al encuentro de Jesús y, antes de ser llamado, le dice: Yo te seguiré. Es él quien toma la iniciativa. NO TIENE EN CUENTA QUE ES EL SEÑOR QUIEN LLAMA Y DA SU GRACIA PARA PODER ASUMIR LAS EXIGENCIAS DE SU SEGUIMIENTO.
Los restantes versículos nos confrontan con las exigencias radicales del seguimiento de Jesús por medio de tres breves y cortantes escenas.
- En la primera, un hombre sale al encuentro de Jesús y, antes de ser llamado, le dice: Yo te seguiré. Es él quien toma la iniciativa. NO TIENE EN CUENTA QUE ES EL SEÑOR QUIEN LLAMA Y DA SU GRACIA PARA PODER ASUMIR LAS EXIGENCIAS DE SU SEGUIMIENTO.
Por eso Jesús obliga a reflexionar: FORMAR PARTE DEL GRUPO DE SUS SEGUIDORES NO
TRAE VENTAJAS ECONÓMICAS, NI PODER NI PRESTIGIO; QUIEN LO SIGUE HA DE PONER
TODA SU SEGURIDAD EN DIOS, NO EN BIENES MATERIALES.
Seguir a Jesús es imitar su modo de
ser: EL NO TIENE DONDE RECLINAR LA
CABEZA, Y HALLA SU PLENA SATISFACCIÓN PERSONAL EN EL SERVICIO A LOS DEMÁS.
- En la segunda escena, otra persona quiere seguir a Jesús pero ve que primero tiene que sepultar a su padre.
- En la segunda escena, otra persona quiere seguir a Jesús pero ve que primero tiene que sepultar a su padre.
Indudablemente se trata de un deber
filial, una acción piadosa derivada del honor que se debe a los padres (Ex
20,12; Lev 19,3), PERO AUNQUE SEA ALGO
MUY BUENO, NO ES LO PRIMERO.
El
Señor es quien debe ser el primero, si no, no es Señor.
LA
ENTREGA A CRISTO ES TAN INCONDICIONAL QUE, FRENTE A ELLA, HASTA EL DEBER DE
ENTERRAR AL PADRE CEDE SU PRIORIDAD.
Con este dicho, que puede resultar
chocante a nuestra sensibilidad, Jesús se sitúa de forma soberana por encima de
todo.
Se coloca en el mismo plano de Dios.
Deja a los muertos que entierren a sus muertos, SIGNIFICA, ENTONCES, QUE NADA, EXCEPTO LO REFERENTE A DIOS, SE PUEDE
ABSOLUTIZAR.
Todo amor, por sublime que sea,
deriva del amor a Dios y a Él tiene que dirigirse.
Jesús antepuso su amor a María y a
José –que angustiados lo buscaban–, a la necesidad que sentía de ocuparse de
las cosas de su Padre (Dios) (Lc 2,48s).
Y hay que recordar que aun en el
plano humano, si un joven no ordena el afecto que tiene a sus padres y NO ADQUIERE LIBERTAD FRENTE A ELLOS, NO
ALCANZA LA ADULTEZ QUE SE REQUIERE PARA FORMAR LA PROPIA FAMILIA, SEGUIR LA
PROPIA VOCACIÓN O EMPRENDER ALGO DE MANERA AUTÓNOMA Y RESPONSABLE.
- En la tercera situación, se repiten y condensan las actitudes anteriores.
- En la tercera situación, se repiten y condensan las actitudes anteriores.
La llamada del Señor exige ya no sólo
de la disponibilidad frente a cosas y afectos, SINO TAMBIÉN FRENTE A UNO MISMO, PARA ENTREGAR LA PROPIA VIDA, PONIENDO
TODA LA CONFIANZA EN DIOS.
MIRAR
ATRÁS ES MIRARSE A SÍ MISMO, BUSCAR SEGURIDADES, ADUCIR MÉRITOS PROPIOS,
ALEGAR POR MI PASADO, POR LO QUE HE CONQUISTADO O LO QUE REPRESENTO.
De todo ello nos puede liberar el
Señor para hacernos ver que la garantía única es la promesa que Él nos ha
hecho y lo que sólo Él es capaz de realizar por mí.
Con su lenguaje sencillo y directo, el Papa Francisco resume este texto del evangelio con estas palabras: “Jesús apunta directamente hacia a la meta; y a las personas que encuentra y que le piden seguirlo, les dice claramente cuáles son las condiciones: NO TENER UNA MORADA FIJA; SABERSE DESPEGAR DE LOS AFECTOS HUMANOS; NO CEDER A LA NOSTALGIA DEL PASADO.
Con su lenguaje sencillo y directo, el Papa Francisco resume este texto del evangelio con estas palabras: “Jesús apunta directamente hacia a la meta; y a las personas que encuentra y que le piden seguirlo, les dice claramente cuáles son las condiciones: NO TENER UNA MORADA FIJA; SABERSE DESPEGAR DE LOS AFECTOS HUMANOS; NO CEDER A LA NOSTALGIA DEL PASADO.
PERO
JESÚS NO IMPONE JAMÁS, JESÚS ES HUMILDE, JESÚS INVITA”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario